Barrax celebra sus fiestas patronales normalmente del 13 al 17 de Agosto, siendo el día más señalado el día del patrón el 16 de Agosto “San Roque”. El acto más relevante de las fiestas es el popular “Toro de Fuego”.
Esta tradición parece ser llegó a esta villa desde Mejico a principios del siglo XIX, siendo introducida por un barrajeño indiano. Este "Toro de Carretillas" está formado por un arnés de madera a cuyo alrededor se colocan las carretillas y el resto del entramado pirotécnico. Es transportado mediante dos asas en los laterales por una persona que va en su interior. Esta persona con la ropa húmeda, incluso empapada, una vez encendida la mecha, sale corriendo tras la gente reunida en la Plaza Mayor, hoy denominada Alcalde Domingo Castillejo.
La composición pirotécnica del "Toro de Carretillas" está formada por dos minados que hacen la función de cuernos, 40 botafuegos, 320 borrachos o buscapiés y 16 metros de mecha estopín. Estos componentes se colocan en el arnés de madera, de tal forma que encendida la mecha en el centro de la parte delantera, corra el fuego paralelo por ambos lados del arnés. Cuando sale un botafuego, detrás de él van ocho buscapiés, ocurriendo lo mismo al otro lado del arnés al mismo tiempo. Un "Toro de Carretillas" dura más o menos 5 minutos
Pintor de renombre universal, nació en Barrax el 7 de julio de 1.894, siendo sus padres, Ramón y Francisca, también hijos de esta villa. En la casa donde vió la luz por primera vez hay colocada una placa que recuerda su nacimiento, la cuál fue descubierta por el propio Benjamín en 1.973. Sus padres tenían una tienda de calzado y Benjamín fue el séptimo de ocho hermanos, cinco varones y tres hembras y a su vez el menor de los varones.
Permaneció en Barrax hasta 1.909 cuando se trasladó a Madrid. En Barrax ya destapó su entusiasmo por la pintura y en Madrid comenzó a realizar pinturas y dibujos que destacan sobre todo por un carácter atrevido debido a que Benjamín aprendió la técnica de la pintura por su cuenta y observando obras de Velázquez y El Greco en el Museo del Prado.
Hacía 1.916 y hasta 1.925 su pintura se bifurca en dos grandes líneas, una realista y otra impresionista. Posteriormente a partir de 1.925 y de las relaciones mantenidas con Juan Ramón Jiménez, Dalí, Alberti y Buñuel entre otros, con los cuáles debatió sus inquietudes culturales comenzó una época cubista con obras como “Bodegón Cubista” y “Bodegón con peces”. En esta época el artista también realizó varios paisajes interesantes.
Los años treinta en la obra de Benjamín están marcados por la abstracción y el surrealismo, para con posterioridad a la Guerra Civil española centrarse en pinturas de paisajes y gentes del campo, primero reflejando un campo austero y posteriormente a partir de 1.946 estos paisajes se convirtieron más luminosos y de colores irreales.
En el año 1.942 inicia la escuela de Vallecas junto a Alvaro Delgado, Gregorio del Olmo, Enrique Núñez Castelo, San José y Carlos Pascual de Lara. Pintaban en Vallecas y alrededores paisajes y labradores.
A partir de 1.955 sus paisajes siguen evolucionando y empieza una nueva época donde destacan cuadros como “Tierras Rojas”. De estos paisajes llenos de colores irreales cabe destacar “Barrax”, un óleo de 1.969 que el pintor realizó a su pueblo.
Entre sus muchos cuadros y pinturas destacan especialmente sus paisajes, donde los temas más utilizados por Benjamín fueron La Mancha con sus grandes extensiones de terreno y la zona interior de Alicante. También colaboró activamente con esta villa en la elaboración de diseños para programas de fiestas de la localidad.
Su primer triunfo lo obtuvo al conseguir la Tercera Medalla en la exposición nacional en 1.941. En 1.943 logró obtener la Primera Medalla. Posteriormente en el año 1.951 en la primera Bienal Hispano-Americana de Arte, celebrada en Madrid en 1.951 le fue entregado el primer premio de pintura.
El 25 de mayo de 1.958 se le rindió un homenaje, en Barrax con motivo de la inauguración del Grupo Escolar que lleva su nombre y la entrega de un pergamino con el título de Hijo Preclaro y Predilecto de esta villa, título otorgado en 1.956. También una de las calles principales de la localidad lleva su nombre. En 1.958 también le fue otorgada la Gran Cruz del Mérito Civil.
En el año 1.961 recibió la Medalla de Oro de la provincia de Albacete y fue nombrado hijo predilecto de la provincia de Albacete en 1.963. En 1.973 recibió la Cuervera de Oro de Barrax, máxima distinción local. En este mismo año de 1.973 fue elegido Académico de Bellas Artes de San Fernando. A esta lista hay que unir multitud de homenajes y distinciones, siendo uno de los españoles que más homenajes ha recibido en vida.
Falleció en Madrid el 16 de Enero de 1.980 y con posterioridad en el año 1.991 sus restos fueron trasladados a su pueblo natal donde reposan junto a un pequeño mausoleo que lo recuerda a él y a su obra.
Las ya famosas "Cuervas literarias" nacieron en Barrax en la noche agosteña del 17 de 1968, día de San Roquillo y tercero en sus fiestas patronales.
Fue en una reunión de amigos en confraternidad de pueblos, entrañablemente unidos por vínculos familiares, sociales, comerciales, etc.. Eran sus pretensiones hacer una lírica ofrenda al molino y al azafrán -símbolos incorporados a la Heráldica por Barrax en su flamante escudo-, y de paso a la llanura manchega, a la belleza de sus mujeres y al ambiente rural que rezuman estos contornos.
A la pareja de barrajeños iniciadores -el entonces alcalde- Eugenio Fernández Cuenca y Francisco Gonzalez Bermudez, se sumaron Felipe Navarro, Jiménez Carretero, Eugenio Ibáñez, Pepe Albaladejo, Benjamín Palencia, Isabel Montejano, Carmen Quintanilla, Alonso Andrés, Eugenio González, Julián Garcia ... y así fueron creciendo de año en año y se incorporaron: Andujar, de la Hoz, Carbonell, Preciado, Roque, León Cuenca, García Solana, Ismael, Castejón, Joaquina, Terrín, Duro del Hoyo, Laserna, Cortijo y un progresivo suma y sigue.
Y fueron aquellos incipientes brindis azucarados de poesía, vino y melocotón, la levadura que ha dado impulso a otras veladas menos improvisadas y con mayor comodidad, quizá, pero que siempre nos ha hecho añorar el delicioso marco y ambiente de aquella inicial, casi en penumbra, iluminados apenas por las luces de un tractor, una clara luna y el brillo de las estrellas. Así quedó grabada aquella inolvidable panorámica en las retinas de cuantos ascendieron a la colina y saborearon la cuerva y los versos que rezumaron de su proyectada intimidad.
Con posterioridad a la Semana Santa, el último domingo de abril o el primero de mayo se celebra una procesión en honor del Cristo del Perdón, cuya imagen es muy venerada por la gente de Barrax. En dicha procesión, de multitudinaria participación, los agricultores le piden al Cristo obtener buenas cosechas. La procesión termina con la llegada del Cristo a la ermita que lleva su nombre. Previamente a la celebración de esta procesión se celebra una novena en honor del Cristo la cuál es seguida con gran devoción por las gentes de Barrax.
La Asociación Cultural de Cine “Paradiso”, es la organizadora del Festival de Cortometrajes Paradiso, habiéndose celebrado este año la IV edición.
El Festival, tiene lugar los primeros días del mes de agosto, coincidiendo con la Semana Cultural, que se organiza antes de dar comienzo las Fiestas Patronales.
En esta edición hubo una gran participación, como también una gran afluencia de público en la proyección de los cortos, como el día de clausura y entrega de premios.